Apoyo al manifiesto "Evangelio, justicia y Derechos Sociales"

LA FAMILIA ESPIRITUAL DE CARLOS DE FOUCAULD EN ESPAÑA APOYA EL MANIFIESTO "EVANGELIO, JUSTICIA Y DERECHOS SOCIALES" E INVITA A PARTICIPAR EN LA CONCENTRACIÓN SILENCIOSA DEL 1 DE DICIEMBRE

Varias entidades católicas madrileñas realizarán un gesto público de protesta el día 1 de Diciembre, de 12 a 14 horas, ante el ministerio de Economía y Hacieda.

Frente al empobrecimiento y al recorte de derechos que está provocando la crisis, más de 30 organizaciones, parroquias, congregaciones religiosas, movimientos y otros grupos de la iglesia de Madrid se mueven y han formado el colectivo Evangelio, Justicia y Derechos Sociales, católicas/os de Madrid.



En la mesa de presentación del manifiesto "Evangelio, justicia y derechos sociales", tres representantes de tres de las entidades firmantes: Pilar Sánchez de Profesores cristianos de la escuela pública, María Jesús Aradia de las Hermanitas de Jesús (Carlos de Foucauld) y Santiago Fuentes de la HOAC de Madrid.

Conscientes de que, como católicos, no pueden "mirar hacia otro lado ante el dolor que nos rodea", los firmantes del manifiesto pretenden lanzar "un grito ante el silencio escandaloso de los que tienen más voz y son más escuchados".

Un grito para decir, desde sus creencias, "que esta situación de recorte y pérdida de derechos sociales no puede continuar, porque es contraria a los deseos de Dios de garantizar la dignidad de la persona".

“Nuestro objetivo es, por tanto, dejar constancia de que, como cristianos, no podemos quedarnos impasibles ante el sufrimiento de tantos ciudadanos que están padeciendo las consecuencias de la crisis y de las políticas de recortes que se están llevando a cabo”

Las entidades firmantes se sienten obligadas a denunciar que las principales víctimas de esta situación son quienes menos culpa tienen de ella. Las “soluciones” que se han ido imponiendo han avanzado más en la privatización de los beneficios y la socialización de las pérdidas, empobreciendo a través de los recortes sociales a los desfavorecidos e instaurando una cultura del miedo que trata de desarmar a los trabajadores y trabajadoras de nuestro país.